En Juchitepec se escuchan relatos de señoras que han tenido hasta 18 hijos, algunas vecinas señoras grandes han tenido 10 hijos, de hecho el programa de oportunidades fomenta tener más hijos y la constitución te da el derecho de tener los hijos que quieras, por otra parte en este mundo globalizado se sabe que en países desarrollados como Canadá y Francia, las parejas no tienen niños. La razón es esta, la vida es difícil y cara en las sociedades que hay, si lo comprendes, entonces estas de acuerdo en no tener más de uno o dos hijos, porque el costo de cuidarlos y mantenerlos como lo marcan las leyes esta fuera del alcance de uno o dos salarios que puedan conseguir ganar los padres, y esto es un proceso que dura al menos 18 años y si se cuenta con la ilusión de que terminen una carrera, se extiende hasta 5 años más, si como sucede aquí la gente no lo comprende, sucede que los muchachos desde secundaria buscan el placer y se topan con el compromiso al enfrentar un embarazo no deseado, este ser al no llegar a un ambiente adecuado, estará condenado a un destino de constante sufrimiento y pasará a formar parte de una sociedad sobre poblada donde la competencia será más dura y la satisfacción será más breve.
La escuela como concepto tiene su razón de ser pero en la práctica no esta dando los resultados que se tienen como ideal, enfrenta muchas desventajas, enumero las más obvias que son el costo de enseñar conocimientos y hacer algunas prácticas; políticas laborales en donde impera la búsqueda de algo mejor a costa de la educación de los alumnos; el juego político de ganar votos manteniendo a la población; la desigualdad familiar, unos pueden, otros no, a unos les importa, y a otros no, y todos conviviendo juntos y finalmente la crisis social con sus bajos salarios y largas jornadas y el desempleo.
Son muchos problemas cruzados que personalmente opino no se podrá ver mejora en el futuro, y si en algo podemos colaborar es en no contribuir a la sobrepoblación y con ello nos ayudaremos a nosotros mismos no teniendo compromisos que no podremos cumplir, el planear nuestra vida haciéndonos a la idea de tener una familia de acuerdo a nuestras posibilidades reales, las tangibles, las que dependen de lo que podemos obtener con una ocupación, con un oficio. Y dejar los sueños de una familia grande y bonita con mucho cariño, esto también lo digo porque veo en las familias grandes de hoy la ambición de quedarse con la herencia, aunque sea modesta, la de la angustia de no tener trabajo y no poder con los gastos de la escuela de los hijos y la frustración de lo poco que se puede obtener de ayuda de los demás por estar ellos también en situaciones semejantes a las nuestras.
Hay que ser optimistas y disfrutar de lo que la vida nos pone a nuestro alcance y platicar de esto con quien puede ser nuestra pareja para ver si estamos de acuerdo en algo tan importante y buscar la manera de controlar nuestros impulsos que si bien son naturales, por la situación actual de nuestra sociedad, son compromisos que nos volverán malas personas, esto es pesimistas, con baja autoestima y frustrados al estar mas lejos de lo que soñamos en un principio.
La escuela como concepto tiene su razón de ser pero en la práctica no esta dando los resultados que se tienen como ideal, enfrenta muchas desventajas, enumero las más obvias que son el costo de enseñar conocimientos y hacer algunas prácticas; políticas laborales en donde impera la búsqueda de algo mejor a costa de la educación de los alumnos; el juego político de ganar votos manteniendo a la población; la desigualdad familiar, unos pueden, otros no, a unos les importa, y a otros no, y todos conviviendo juntos y finalmente la crisis social con sus bajos salarios y largas jornadas y el desempleo.
Son muchos problemas cruzados que personalmente opino no se podrá ver mejora en el futuro, y si en algo podemos colaborar es en no contribuir a la sobrepoblación y con ello nos ayudaremos a nosotros mismos no teniendo compromisos que no podremos cumplir, el planear nuestra vida haciéndonos a la idea de tener una familia de acuerdo a nuestras posibilidades reales, las tangibles, las que dependen de lo que podemos obtener con una ocupación, con un oficio. Y dejar los sueños de una familia grande y bonita con mucho cariño, esto también lo digo porque veo en las familias grandes de hoy la ambición de quedarse con la herencia, aunque sea modesta, la de la angustia de no tener trabajo y no poder con los gastos de la escuela de los hijos y la frustración de lo poco que se puede obtener de ayuda de los demás por estar ellos también en situaciones semejantes a las nuestras.
Hay que ser optimistas y disfrutar de lo que la vida nos pone a nuestro alcance y platicar de esto con quien puede ser nuestra pareja para ver si estamos de acuerdo en algo tan importante y buscar la manera de controlar nuestros impulsos que si bien son naturales, por la situación actual de nuestra sociedad, son compromisos que nos volverán malas personas, esto es pesimistas, con baja autoestima y frustrados al estar mas lejos de lo que soñamos en un principio.